La muerte puede presentarse de diferentes maneras. Está la muerte que se presenta como consecuencia de la vejez, o de una enfermedad aguda, crónica o terminal; están las muertes por accidentes vasculares cerebrales, por infartos, por accidentes varios, por asesinato. Y hay la muerte por suicidio. Todas esas muertes tienen su duelo, suscitan dudas y preguntas y repercuten en los sobrevivientes.
Sin embargo, la muerte causada por el suicidio es la más difícil de aceptar, la más difícil de integrar emocionalmente. Aunque el suicidio siempre haya existido en la historia de la humanidad, siempre ha provocado interrogantes sobre sus causas, sobre el sentido de la vida del que se suicida y de los mecanismos personales y sociales que pueden llevar a la persona a quitar la propia vida.
Hecho cobarde para algunos, decisión tomada ante un sentimiento de plenitud de existencia para otros, último grito y expresión de libertad personal para otros, el suicidio sufre un notable incremento en nuestra sociedad y, de manera alarmante, entre los más jóvenes.
Este libro pretende ser una aportación original al estudio de ese problema y lo presenta desde las vertientes psicológica, filosófica, médica, teológica y bioética.